Ahora, después de seguir el Programa con Amalia, me hace mucha más ilusión que mi novela salga al mundo, y poder presentarla a las editoriales, que todos pronto puedan disfrutar de mi novela de aventuras.
Y es que tengo que confesar que, como escritora novel, conseguir que una editorial quiera publicar tu obra es una tarea casi tan difícil como intentar alcanzar el sol con la mano. Parece que estás a punto de tocar sus rayos, pero por mucho que lo intentes es imposible llegar. Ese fue mi problema principal, las editoriales no me abrían las puertas.
Después de buscar agencias a diestro y siniestro, me encontré con el Programa que ofrece Hera Ediciones, por pura casualidad. Tuve mis dudas, ¿pero qué podía perder?, al menos Hera Ediciones era un camino más tangible que la quimera de rozar el sol.
Les envié mi manuscrito. Cuando me devolvieron el informe de lectura me di cuenta que mi novela tan fantástica, que iba a conquistar el mundo, tenía fallos tales como que algunos personajes eran demasiado infantiles para la propia trama, que mi utilización de las comas era alocada, en fin, que nadie habría publicado mi obra en ese estado. Que toda mi euforia de escritora novel era simple humo.
Seguí las recomendaciones de Amalia, que me atendió de forma personal, y di un cambiazo a mi historia.