«En primer lugar agradecer el buen trato recibido. Nunca había hablado con nadie de algo escrito por mí y solo esto me ha sido de gran ayuda. Una forma de perder el pudor muy recomendable. Por otra parte decir que las tutorías me han hecho ver cosas que pasaba por alto y que ahora veo esenciales. Me refiero a cuestiones de estilo, estructura, etc… Era consciente (todavía lo soy) de que hacía muchas cosas mal y por tanto no me ha costado mucho cambiar y empezar de nuevo. Ahora veo más claro como tiene que ser la historia que quiero contar y estoy trabajando en ello. La persona con la que me he comunicado, Amalia, genial, siempre dispuesta y por mi parte nada que reprochar. En general, y según mi experiencia, la experiencia ha sido muy buena.» Antonio Carvajal Jiménez (España), autor de La Guerra es sin fin