Son múltiples los desafíos con los que me encontré antes de comenzar con el Programa; elegir la voz narrativa y el tiempo, asegurarme de que en cada escena sucedía algo que atrapaba la atención del lector, elaborar un perfil completo de mis personajes principales, evitar incoherencias, elegir el comienzo y el final y, esto puede parecer de broma, tener cuidado de que los presonajes no se hicieran con el control de la novela.
El Programa y Amalia me han ayudado con su ánimo y sus consejos. Lo que más me ha ayudado es el dossier que preparaste de mi primer borrador. Me fue de gran utilidad, me animó, algo que siempre viene bien, y tus recomendaciones fueron mi guía para revisar el texto y mejorarlo.
Ahora que estoy más cerca de publicar, estoy ilusionado y agradecido por el trabajo que llevais a cabo en esta tarea tan complicada; soy consciente de que las editoriales reciben miles de manuscritos y que ya sería un logro que se leyeran el mio.