Nací con mis dos hermanos en Granada en 1966, pero llegué a Albacete con seis años donde he pasado toda la vida.
Cursé estudios de informática y con 24 años cree mi primera empresa, a la que sucedieron diversos proyectos personales de emprendimiento deportivo, empresarial y social, el principal rasgo de mi carácter desde muy joven.
Mi separación después de 29 años de relación y otros muchos problemas, algunos de apariencia interna y externa muy grave, acaban desencadenando una inesperada crisis personal que, hace más de doce años, tuvo consecuencias interiores devastadoras, y me llevan a sufrir una larga y ,por momentos, fuerte depresión.
En ese doloroso proceso traté de encontrar respuestas a preguntas que me inquietaban, y decidí emprender mi propia búsqueda experimental. En ella aparece un centro de meditación budista de la tradición Kadampa que me conecta con mi gurú raíz, el venerable Gueshe Kelsang Gyatso Rimpoché, e inicio un proceso personal de transformación maravilloso.
El cambio vital experimentado desde que hace seis años encontré a las diversas maestras y maestros budistas que me han enseñado y me siguen mostrando los caminos del dharma de Buda y de la meditación, me lanzan en 2019 a un irrefrenable deseo de escribir, y de ahí surge “El elixir de la eterna felicidad. El camino”, y a continuar escribiendo sin parar otros cinco libros que forman parte de la serie de “El elixir de la eterna felicidad”. Estos agrupan novelas, cuentos, relatos, poesías, historias fabuladas y ensayos que espero vayan viendo la luz en los próximos años, y cuya intención bondadosa es acercar, de una forma que trato que sea amena y sencilla, las enseñanzas de Buda a las personas curiosas, inquietas y quizás que sufren o se encuentran insatisfechas con lo que están viviendo.
Deseo tratar de ayudar a mis lectores a ponerse en modo búsqueda para que, como me ha pasado a mí, puedan tener una experiencia interior liberadora, sanadora, enriquecedora y sobre todo feliz; deseo ayudarles a hallar respuesta a preguntas fundamentales: ¿Por qué sufrimos? ¿Qué es la felicidad? ¿Hay realmente posibilidad de ser feliz? ¿Cuáles son las causas verdaderas del sufrimiento y la felicidad? ¿Cómo puedo alcanzar la felicidad y eliminar el sufrimiento? ¿Cuál es la propuesta de Buda? ¿Qué es exactamente la iluminación o el nirvana? ¿Cuál es el papel de la meditación budista en todo esto…?
Los libros de El elixir de la eterna felicidad pretenden animar a ponerse en ese “modo búsqueda”, para abrir la mente, investigar, conocer y experimentar la propuesta budista de una felicidad imperecedera libre de toda clase de sufrimiento.
Si deseas conocerme mejor debes saber algunas cosas más, como que después de una juventud vivida en un entorno religioso católico, descreído por lo que contemplo en la Iglesia, y tras una reflexión, acabo abrazando el ateísmo con convicción y firmeza para, una década después, pasarme al agnosticismo.
Durante una larga etapa de mi vida me alejo de toda creencia lejana de la ciencia y la razón. La muerte de mi madre y la necesidad de mi padre de ser acompañado en una peregrinación a Jerusalén, me hacen vivir, hace veinte años, un viaje de acompañamiento familiar que se convierte en uno espiritual, inesperadamente transformador, y a tener una experiencia tan vívida e intensa, que me lleva dos años después a un radical cambio de vida.
Lo vivido en los Santos Lugares puso en marcha un proceso de reconversión, un reencuentro con una fe adulta basada en razones lógicas válidas para mí, que me arrastran a abandonar el mundo de la empresa privada. En esa época emprendo una aventura en los barrios marginales de mi ciudad, en los que creo una ONG que, actualmente, sigue desarrollando una labor que trata de aliviar las condiciones de vida de las personas que sufren pobreza.
Seguramente seré de las pocas personas que se consideran budistas y a la vez cristiana, simplemente porque después de estudiar, leer, meditar y profundizar en el pensamiento budista, me di cuenta de la íntima conexión profunda entre lo que esencialmente Buda y Jesús de Nazaret enseñaron en sus diferentes contextos históricos, religiosos y sociales, pero esto es otra historia que quizás un día sea interesante contar…