¿No te has preguntado cómo mejorar tu estilo, y que alguien te explique cómo poder desarrollarlo en dos o tres pasos rápidos?
¿Que supieses cuál es la forma ideal de darle sentido a una frase, o cómo enfocarla para que atrape a tu lector?
Vamos a ver unos consejos para mejorar tu escritura.
¿No te pasa que cuando escribes te encantaría tener unas pautas para hacerlo con fluidez, de una forma sencilla, y que las frases saliesen de tu cabeza de un modo casi mágico?
A mi también me gustaría muchísimo, lo confieso, pero sé que no existe una fórmula mágica para que escribir sea una tarea fácil.
Si así fuera, dejaría de ser un arte (y una delicia) para convertirse en una acción sin ningún mérito.
Y escribir lo tiene. Y mucho.
La «heroicidad» del escritor
Después de cuatro libros en el mercado, sé que los escritores que cada año publican un libro son casi héroes.
Por encima de todos, Mario Vargas LLosa, mi favorito; hace unas semanas leí una entrevista suya en la que decía que aún hoy se pone nervioso cuando tiene que escribir.
¡Para que luego digan que hacerlo es sencillo!
A lo largo de los años, he leído muchísimos manuscritos y he sacado mis propias conclusiones sobre el estilo y las formas de escribir (así como mis propias opiniones, que iré compartiendo contigo a lo largo de las próximas semanas).
Y es que todos queremos unas pautas sencillas, unos “truquillos” rápidos con los que poder avanzar en la escritura.
Todos vamos acelerados en nuestro día a día, y si puedes tener unos consejos que te permitan mejorar ya a la vez que escribes, mejor, ¿no?
Pues aquí comparto contigo tres pequeños consejos que he extraído de la lectura de muchos textos, y que puedes aplicar ya, desde ahora mismo.
Consejos para mejorar tu escritura. ¿Por donde empezamos?
– Por las frases. Sin duda, uno de elementos más importantes en el libro.
Y es que el ritmo del texto depende de cómo estén construidas las oraciones.
Es decir, podemos tener un texto súper trepidante que nos incite a seguir leyendo, o lentísimo y que nos aburra.
Lo ideal para conseguir el mejor texto es mezclar frases más cortas con algunas un poco más largas. Y es que la armonía se logra con una buena mezcla de oraciones largas, cortas e intermedias.
– Seguimos por el empleo de los sinónimos.
¿Cualquier palabra sirve para designar cualquier otra?
La verdad es que no, por eso debes ser muy preciso a la hora de escoger la palabra exacta para tu relato.
Por eso, si no quieres repetir la misma palabra varias veces y buscas sinónimos para ella pero ninguna se adecua con precisión a lo que tú pretendes, será mejor que optes por la repetición antes de que sacrifiques la claridad de tu texto.
Cuidado con los adverbios
– Decía Somerset Maugham que “Escribir con sencillez es tan difícil como escribir bien”. Por eso tienes que apostar por el último de los consejos, que es el empleo de los signos de puntuación, y la eliminación de adjetivos y adverbios.
Tu máxima a partir de ahora debería ser “punto, punto, punto”, ese pequeño signo tantas veces olvidado.
Respecto al empleo de los adverbios y adjetivos, revisa tu texto y mira cuántas palabras puedes eliminar. Por ejemplo, expresiones como muy, justo, verdaderamente, realmente, quizás, asombroso o increíble, entre otras.
¿A que ahora ya lo ves algo más claro? Pues ya puedes puedes dar unos pasos más en el desarrollo de tu estilo literario.
Y si escribes novela, no te pierdas este artículo en el que te cuentos unos “truquillos” que te resultarán útiles para seguir trabajando tu modo de escribir.
¿Quieres que sigamos hablando de literatura, de tu estilo o tu libro? Pues escríbeme. ¡Te espero!