
Creo que el trabajo y la colaboración llevada a cabo con el Programa ha sido efectivo y muy fructífero, pues me ha ayudado a la hora de darle una versión definitiva al texto. Amalia ha estado en todo momento a mi disposición, de manera efectiva y afectiva, con su análisis y sus sugerencias.
En mi caso, no es el primer libro que publico, pues ya llevo una decena publicados entre otros muchos textos y antologías, pero siempre que estás en el umbral de publicar un nuevo libro sientes emoción y esperanza, como si fuese el primero, ya que significa la culminación de un largo proceso de creación lenta, dificultosa, ignorada, anónima y esforzada que espera, como desenlace natural, poder llegar a los lectores. De alguna manera es el remate de un largo y complicado proceso de creación que, por fin, parece que empieza a ver la luz.
Y es que en principio, antes de comenzar el Programa, necesitaba una mirada exterior que me confirmara o no, dado lo inusual de mi novela, si estaba en niveles aceptables o, por el contrario, habría de corregir todo, desde el planteamiento hasta el estilo, la sintaxis, etc.